lunes, 23 de junio de 2008

¡Ya llegué raza!

Por algo no me gusta mucho viajar por trabajo...

Salí el miércoles de viaje y ahí estoy, el viernes, esperando regresar. Llegué al aeropuerto para tomar mi avión de regreso y ¡oh sorpresa! el avión se separó del gusano para salir 5 minutos antes de la hora. Claro que no contaba que ibamos a estar esperando 20 minutos la autorización para despegar, y otros 45 minutos la autorización para estacionarse y podernos bajar (en Houston había una tormenta eléctrica y tienen prohibido utilizar las rampas y demás) y los otros 45 minutos en el avión de Houston a San Diego esperando pasajeros que venían en conexión retrasadas. Y luego mi maleta no llegó. Al registrarla en mostrador, le pusieron una etiqueta de equipaje prioritario "para que salga primero que todas"; 15 minutos después sospeché que no había llegado, y así fue. Tuve que regresar el sábado a recogerla. Pero el viernes, lo que provocó es otro retraso en mi agenda. Llegué a casa a las 12:45 am del sábado. Que le vamos a hacer.

Lo peor del asunto es que este fin de semana pasado fue el mas caluroso de lo que va del año; tanto que la noche del sábado cerre con llave las rejas de la casa y dejamos abierta la puerta principal para que circulara mas aire. Parecía calma chicha, el aire estancado y caliente. Ya está mejorando.

Entre otras noticias de fin de semana; le quitaron el yeso a Pinka y ya anda caminando como si nada (o casi), Mediana tuvo su presentación de su clase de baile (en el teatro de la universidad, ayer domingo a las 6:00 pm sin aire acondicionado) y Vicky regresó de Los Cabos antes de lo planeado (fue con unas amigas a festejar la graduación de una de ellas) porque en el trabajo no le dieron todos los dias de permiso. Así es la vida.

Bueno, nos vemos al rato.

No hay comentarios: