Dele, dele, dele...

Así me siento a ratos; que alguien me está dando indicaciones de que hacer y como maniobrar.

El fin de semana se pasó muy rápido. Empezó en casa de Maria y Will, en donde estuvimos (Bonita y yo) platicando de como estamos, que sigue, como vamos a salir de esto. Bonita se fue temprano (está asistiendo a un diplomado y tenía clase la mañana siguiente), yo me quedé un rato mas platicando y platicando.

El sábado y domingo por la mañana estuve con las niñas. Las llevé a su clase de pintura el sábado y el domingo fuimos a desayunar al restaurant favorito que tenemos en este momento. Casa de Coronado´s. La comida está rica y los precios exageradamente accesibles (23 pesos por el platillo de niño), lo único malo es que siempre está lleno y tuvimos que esperar mas de una hora para conseguir una mesa y que nos atendieran. En fin, no teníamos otros planes.

Ambos días por la tarde estuve "noviando" con Bonita. Mucha conversación y ejercer la nueva manera de ponernos de acuerdo. Preguntando al otro como se siente con las decisiones u opiniones. Muy instructivo y efectivo.

Ayer vino mi jefe de visita, trajo con el a una persona que trabajaba en el corporativo hasta hace 6 meses. Acaba de renunciar al trabajo que tenía y llamó a mi jefe para preguntarle si le podía ayudar, lo mandó a Tijuana a que nos ayude con un par de proyectos que tenemos. Aquí estuvo hoy también, ya empezó con el trabajo que le asignaron, así que parece que se va a mover muy rápido.

Ahí van las cosas moviéndose. Poco a poco nos seguimos entendiendo (y re-conociendo) mejor Bonita y yo. También con las niñas la interacción ha cambiado un poco; las invitamos a que pregunten las cosas y que no supongan y estamos teniendo pláticas muy interesantes. Como el por qué la economía de Estados Unidos está en mala situación y qué efecto va a tener en México. A ver que sigue.

Ya me dió flojera seguir escribiendo, estoy un poco estresado por una visita de cliente que tenemos el jueves. Son japoneses y parece que bastante especiales (al menos eso nos dicen todos los que los conocen). Luego les cuento.

Hasta luego.